El encuentro de la victoria

    

El l8 de diciembre de 1956, a media noche, entre cañaverales y bajo cinco palmas, en la zona oriental del país, tiene lugar el encuentro del grupo de Raúl Castro, compuesto por cinco combatientes, y el de Fidel Castro, integrado por tres. El júbilo es inmenso. El hecho tiene lugar 13 días después de la sorpresa sufrida por los expedicionarios del yate Granma, en Alegría de Pío, que provocó las primeras bajas a la tropa rebelde y la dispersión  de sus integrantes. Muchas peripecias y peligros tuvieron que sortear los revolucionarios, que contaron con la valiosa ayuda de valientes campesinos. La unión de estos dos grupos fue determinante para continuar la lucha. En ese momento Fidel preguntó a Raúl: ¿Cuántos fusiles traes? Y Raúl respondió: cinco. “Y dos que tengo yo –expresó Fidel—siete. Ahora sí ganamos la guerra”. Y la afirmación hecha por el líder rebelde en momentos sumamente difíciles se cumplió el Primero de Enero de 1959 con el Triunfo de la Revolución Cubana.