Trump y las relaciones de EEUU con Cuba

   El presidente norteamericano Donald Trump se pronunciará próximamente --como la anunció-- acerca de las relaciones de Estados Unidos con Cuba. Como todos hemos apreciado, sus asesores han estado estudiando el asunto con detenimiento. Sopesan cuánto pueden perder o ganar si deciden revertir la política de acercamiento o continuar, o incluso mejorar mucho más, los vínculos con la Isla. Algo es cierto, como hombre de negocios, Trump sabe cuánto puede favorecer a los empresarios de su país, y a un gran número de trabajadores norteamericanos el hecho de que se puedan realizan negocios en muchos terrenos, que por demás tendrían el beneficio de la cercania, la posición geográfica de Cuba, la calidad de los productos y hasta el conocimiento de los actores de una y otra parte. Además, a nuestro juicio, el Presidente norteamericano debe estar pensando en dar pasos que lo afiancen en el sillón presidencial: sobre todo en momentos en que los asuntos no le van muy bien que digamos con el mundo, y en su propia nación, luego de su retirada de los acuerdos de París sobre clima, y otras acciones poco populares. Otros intereses, como satisfacer a ciertos perrsonajes de la Florida que le son afines, pudieran pasar a segundo plano. Lo cierto es que veremos cuán pragmático o no es el impredecible inquilino de la Casa Blanca.