martes, 3 de febrero de 2015

Símbolo del coraje de los cubanos

Luego del asedio a Candelaria, actual municipio de Artemisa (entonces pertenecía a la provincia de Pinar del Río) el Lugarteniente General Antonio Maceo se retiró con sus tropar al cafetal de Frías. Era al anochecer del 6 de febrero de 1896. Informado allí de que una fuerte columna de 600 hombres, al mando del coronel español Segura, decidió cortales el paso. La batalla tuvo lugar en Río Hondo y pasó a la historia como símbolo de intrepidez y coraje de los cubanos. El lugar, situado a unos cuatro kilómetros de San Cristóbal, no era favorable para maniobrar y arrollar al enemigo con una contudente carga al machete, mas Maceo ordeñó atacar por los flancos. El combate se tornó muy reñido. Las fuerzas realistas se defendían formadas en cuadro. El Titán de Bronce quedó asombrado cuando, tras la refriega, corroboró cómo se habían lanzado a la lucha un grupo de lugareños recién incorporados, quienes no poseían armas. Ello le hizo exclamar: "Nunca había visto eso, gente novicia que ataca inerme a los españoles, con el vaso de beber agua por todo utensilio !Y yo le daba el nombre de impedimenta! Sobre este acontemiento después diría Fidel: Así actúan los pueblos cuando se disponen a luchar: les tiran piedras a los aviones y viran los tanques boca arriba.

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